El perro se sentó al lado de Wilson y él de inmediato pensó que quizá era un animal extraviado.
“Mi nombre es Dew. No estoy perdido. Me gusta vagar. Dime que vaya a casa”.
Una vez supo que Dew tan sólo estaba dando un paseo, disfrutó de su compañía por un rato.
Resulta que Dew es bastante conocido en este pueblo y sus andanzas son sólo una excusa para hacer nuevos amigos. Todos los días regresa a la granja en la que vive con su familia.
Además de la información en su collar, Dew lleva puesto un rastreador con Sistema de Posicionamiento Global.
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