Esto ocurrió en China hace poco. Se trata de un niño que sufrió un terrible accidente, y que tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital después que una gran puerta de cristal se destrozara, mientras jugaba con ella en una tienda local de Apple.
Las cámaras de vigilancia grabaron el horrible episodio que tuvo que vivir el pobre nene (y su madre). Todo comenzó cuando dos niños jugaban con una puerta corrediza de vidrio, mientras que la madre concentra su atención en la compra de un teléfono celular.
Uno de los niños empuja la puerta abierta, que repentinamente se rompe en pedazos y los restos le cortan su cara.
La madre inmediatamente recogió al pequeño y lo llevó al hospital, en medio del pánico. Se sabe que el niño sufrió numerosas heridas que debieron ser suturadas.
Dicen que la madre ahora busca demandar a la tienda por 32.000 dólares como indemnización. Asegura que después del incidente su hijo se ha vuelto más introvertido en la escuela, y dice estar preocupada porque ello podría afectar severamente su crecimiento y desarrollo.
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